Ha llegado el Espíritu de la Navidad
Entramos en la recta final de un año, cuanto menos diferente. A pesar de que no nos gusta ser nada dramáticas, tenemos que reconocer que está siendo un año duro, muy duro. Y se avecinan las Navidades, que para muchos tampoco serán fáciles. Pero como todo en la vida, los momentos de grandes dificultades son también momentos de enormes aprendizajes, de crecimiento y transformación.
«Los momentos de grandes dificultades son también momentos de enormes aprendizajes, de crecimiento y transformación»
Si miramos todo lo que ha sucedido este año, a nivel individual y colectivo, desde esa perspectiva, desde el crecimiento y transformación, seguro que podremos extraer y valorar muchas cosas nuevas, situaciones superadas, logros, y otras muchas cosas que los momentos difíciles nos ofrecen y ponen de manifiesto.
Hoy 21 de diciembre entramos en una nueva Era, la Era de Acuario, según marca la astrología. Y este es un punto de inflexión para la humanidad. Para darse un cambio de paradigma, para pasar de una sociedad distópica a una humanidad consciente, saludable. Y para que esto pueda darse, hemos tenido que tocar fondo en este 2020. Y esta Era de Acuario, que durará aproximadamente 2.100 años, tiene la característica de ser muy individualista, trabajando desde la individualidad del Ser, para el bien colectivo. Ha llegado el momento de SER, de poder ser el cambio que queremos ver en el mundo, en la sociedad, en nuestro entorno, en nuestra casa.
«Ha llegado el momento de SER, de poder ser el cambio que queremos ver en el mundo»
Han salido a la luz muchas cosas que debían ser miradas y limpiadas, hay que poder mirar lo que no se ve del sistema, para que pueda sanar, y la sociedad es un gran sistema que estamos viendo, debe ser sanado. Mirar lo que está escondido, lo que se oculta, a todos los niveles, personal, profesional, social, mundial. Desde lo individual a lo colectivo.
El concepto de “nueva normalidad” es para nosotras, un concepto erróneo. No debemos conformarnos con una “nueva normalidad”, sino derribar los cimientos sobre los que nuestra sociedad estaba construida, porque no funcionan, no son justos, no están equilibrados. Para que un 10% del planeta podamos tener privilegios, el otro 90% restante está siendo explotado. Estamos destruyendo a la Madre Tierra. Y esto ha dejado de ser sostenible.
En Tejiendo Redes estamos muy contentas, porque podemos contribuir a este gran cambio, a este derribar todo lo que ya no nos vale, lo viejo, lo rancio, lo que ya no sirve y no funciona. A ese cambio de creencias y valores, al gran cambio de conciencia que ya se está dando, y que este 2020 ha puesto de manifiesto. Estar y actuar de un modo consciente, con respeto hacia uno mismo y los demás. Ese respeto a uno mismo, poniendo límites de manera saludable, respetando nuestras necesidades y atendiéndolas, siendo muy conscientes también de cómo nuestro comportamiento afecta, tanto a nosotros mismos como a los demás. Siendo muy conscientes de lo que ya no es necesario, de lo superfluo, para tratar así de vivir cada vez más en el presente, desde el SER y no desde el hacer. Dejar de tapar nuestras emociones, el vacío y las necesidades consumiendo. Consumiendo productos, comprando artículos que no necesitamos, comiendo sin hambre, consumiendo televisión sin medida. En definitiva, consumiendo para tapar lo que no queremos ver o vivir.
Se trata de conectarnos más con nosotros mismos. Lee, pasea, medita. Trata de guardar un tiempo de silencio todos los días para estar en ti. Para escucharte. Para decirte cosas amables, tratarte con amor. Porque lo que es dentro es fuera. Si dentro tienes amor y amabilidad para contigo, lo tendrás para los que te rodean. Y desde ahí se construye esa nueva humanidad. Desde el AMOR. Como decía Gandhi, si quieres cambiar el mundo, cámbiate a ti mismo.
«Si quieres cambiar el mundo, cámbiate a ti mismo». Gandhi
Ha llegado el momento. Ya no hay excusas, ni tiempo que perder. Los “pero”, los “es que” y los “pero es que” son meras excusas que te dices y que dices a los demás cuando te resistes a pensar, sentir o hacer algo. Son justificaciones. Pero nada de esto se sostiene ya. Si quieres conseguir algo, trabaja para conseguirlo. Si quieres pensamientos positivos y un enfoque de vida diferente, pon mucha atención en qué te dices y cómo te lo dices. Trata de ser muy consciente de tus diálogos, tanto internos como externos. Si quieres cambios en tus hábitos, empieza hoy, no esperes al año nuevo, al curso nuevo ni a nada. Hoy, ya es cambio.
Para eso ha venido el 2020, para darnos cuenta de que ya no hay tiempo que perder. Que no estamos aquí eternamente, sino de prestado. La Madre Tierra nos presta su hogar para hacer el nuestro, y desde el amor del hogar, construir un mundo mejor. Hemos perdido a muchos seres queridos en este tiempo. Hagamos que sus partidas hayan servido para algo. Para danos cuenta de que la vida es un regalo, y que no aprovecharlo cada día es un desperdicio enorme. No desperdiciar un abrazo, una sonrisa, elevarnos para no dejar que el miedo se apodere de nosotros, porque vivir desde el miedo, no es vivir, es estar muerto en vida. El miedo está para ser enfrentado, para mirarlo a la cara, y agradecerle nuestra supervivencia. Sin él seguramente habríamos muerto ya. Pero si dejamos que dirija nuestras vidas, no estaremos en otras vibraciones más elevadas, como la de la alegría, el disfrute o el amor. Esa nueva humanidad necesita una vibración muy alta.
«Esa nueva humanidad necesita una vibración muy alta»
Hoy es el día del Espíritu de la Navidad, una tradición Celta que se celebra cada 21 de diciembre, por el calendario maya, con la llegada del invierno. Hoy es un día con una energía muy especial, con una alta vibración en el que tenemos que abrir nuestras puertas y dar la bienvenida al Espíritu de la Navidad y prepararnos para la noche más larga del año.
¿Te apetece hacer un ritual? Te proponemos que hagas tres listas. Tómate tu tiempo para pensarlo, escribirlo y prepara el espacio. Lo ideal es que pongas esencia de mandarina, o que peles unas mandarinas para que el espacio se impregne de este olor, deja fluya la inspiración, las emociones, los pensamientos, las necesidades y de esta manera, no te dejes nada en el tintero.
En la primera lista escribe con todo lo que has aprendido a lo largo de este año. Tus logros, las situaciones que has superado, los aprendizajes. Todo aquello que te haya hecho sentir miedo y lo hayas vencido, superado. Todos los cambios de creencias que hayas tenido. La transformación de la persona que eras en enero de 2020 y en la que te has transformado a lo largo del año. Ese debe ser el legado que el año 2020 deje en ti.
La segunda lista, en una hoja aparte, consiste en escribir todo aquello que quieres dejar atrás. Que quieres soltar, que ya no te pertenece y que no tiene cabida en tu vida. Escribe esa lista y guárdala aparte.
Y por último, escribe una tercera lista o carta, de todo lo que nuevo que quieras atraer a tu vida. Lo que, a partir de este momento, quieras abrazar y recibir. Escribe tus 12 propósitos y peticiones del año. Refleja en estas líneas cambio que quieras ver en tu vida, para así reflejarlo en tu entorno, y ser el cambio que quieras ver en la sociedad también. Pero recuerda que, primero antes de escribir tus deseos, pide por la humanidad.
Te proponemos que la primera lista la guardes en un lugar accesible, para que puedas releerla de vez en cuando y tengas presentes todos esos aprendizajes.
Con la segunda lista, hoy 21 de diciembre, haz una pequeña meditación, simplemente un rato de silencio para despedir y soltar todo lo que has escrito en esa segunda lista. Y después, cuando hayas terminado, la quemes, o la rompas en mil pedazos y lo entierres. Lo que te surja hacer con ella.
Y después coge tu tercera lista, la de tu propósitos y deseos. Haz también una pequeña meditación, simplemente agradeciendo todo lo que se va, lo que has aprendido y lo que está por llegar. Agradecerte a ti mismo la oportunidad de vivir este cambio de paradigma y de ser parte de él. Sentir la energía de amar y agradecer por todo lo que ya tienes. Guarda esta lista muy cerquita de ti, en la mesilla de noche para que cada día al acostarte sueñes con todo ello, y que por la mañana cuando te levantes, lo hagas realidad.
Vamos a celebrar esta tradición Celta con amor y benevolencia hacia los demás, y hacia nosotros mismos.
¡Feliz 2021!
Almudena Campo & Vanessa Bertomeu
Tejiendo Redes